El concepto de sostenibilidad está en el día a día. Cada vez es más importante que tengamos en cuenta que solo tenemos un entorno, un medio ambiente y que todas nuestras acciones le afectan y le condicionan.
De ahí, la importancia que los nuevos proyectos urbanos tengan en cuenta la sostenibilidad.
Pero, ¿sabemos qué conlleva integrar este concepto en una ciudad? ¿Qué implica tener una ciudad sostenible?
Al comienzo de empezar a escuchar y a tener en cuenta la sostenibilidad, una ciudad que integraba este concepto era aquella que contaba y hacía uso de las nuevas tecnologías. Ahora que ha pasado el tiempo, una ciudad sostenible va más allá. Porque ya no nos basta que sea sostenible, ahora tiene que ser inteligente y saludable.
Por eso, en VORTEX estamos convencidos que nuestras soluciones de ocio acuático se adaptan a la perfección a este nuevo concepto de ciudades y se convierten en el elemento que cualquier proyecto de desarrollo sostenible urbano necesita.
Crear un entorno de uso público saludable
El primero de los objetivos del desarrollo sostenible en una ciudad es que la creación de espacios verdes de relajación, alejados de la pesadez del hormigón de la ciudad, favorece a sociabilización de toda la comunidad lo que con lleva que haya pequeños espacios saludables en los que tener una vía de escape al ajetreo diario.
Relaciones sociales para tener una sociedad mejor
El segundo de los objetivos es tener un espacio accesible en el que todas las personas que quieran acceder a él puedan hacerlo en igualdad de condiciones.
Y aquí, es donde entra en juego una de las principales características de las soluciones para parques de agua sin profundidad de VORTEX.
Todos nuestros juegos acuáticos pueden ser utilizados por todas las personas. Sí, has leído bien. Cualquier persona sea de la edad que sea e independientemente de sus capacidades físicas, motoras, sensoriales o cognitivas.
Porque dentro de las ciudades saludables e inteligentes, debe de haber elementos que sean capaces de educar. Elementos que cuenten con valores diferenciales como el compartir o la convivencia. En definitiva, elementos que permiten fomentar las relaciones sociales.
Hacer del juego un medio de desarrollo
Como bien sabemos, el juego es uno de los factores más importantes y con más peso dentro del proceso de desarrollo de los niños.
Solo hace falta echar un poco la vista atrás pero vernos a nosotros mismos saltando, corriendo o riendo en un parque al aire libre. Hoy en día, si cabe, cobra más importancia este aspecto: jugar al aire libre.
En un mundo cada vez más digitalizado, son muchos los niños que pasan la mayor parte de su tiempo libre jugando con el móvil o con el ordenador. Y aunque eso está muy bien, no debemos de olvidar que todos tenemos a nuestro alcance un bien tan preciado como lo es el medio ambiente y la naturaleza. Un recurso, que debemos respetar pero que también tenemos que disfrutar.
Porque el juego al aire libre permite a los más pequeños jugar sin reglas. Y, ¿a qué nos estamos refiriendo cuando hablamos del juego sin reglas? Por descontado no hablamos de jugar a lo loco y sin respetar las normas de la comunidad. Hablamos de jugar libremente para que la autonomía personal de los pequeños se fomente y para que estos aprendan a tomar sus propias decisiones.
Y eso no es todo, porque el juego favorece el desarrollo de la motricidad, la imaginación y permite que desde bien pequeños, los niños aprendan a sociabilizar con el resto para aprender valores como el juego en equipo.
Diferentes objetivos del desarrollo sostenible en las ciudades que se pueden materializar en una solución de ocio acuático que esté a la altura no solo de las necesidades del proyecto sino también a la altura de las expectativas.
Soluciones que ya están presentes en muchas ciudades de todo el mundo y de las que puedes ver una pequeña muestra en nuestro eBook: “Los 10 mejores proyectos hechos realidad en España”.
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